Con la CAÍDA DEL MURO DE BERLÍN EN 1989 y el FIN DE LA GUERRA FRÍA a inicios de la década de los 90s del siglo pasado, se puso fin también al anterior ORDEN BIPOLAR que había regido en el mundo desde 1945, tras el fin de la Segunda Guerra Mundial con el triunfo de los Aliados sobre las fuerzas del Eje Alemán, surgieron las dos grandes superpotencias hegemónicas de la Guerra Fría, por un lado los Estados Unidos de Norteamérica, con sus ideas de democracia liberal en lo político como de libre mercado y libre comercio internacional, con una economía de corte netamente capitalista y por otro lado, la Unión de Republica Socialistas Soviéticas (URSS),con la visión de una economía de corte socialista, regida políticamente por un único partido, el Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), de este modo ambas superpotencias, constituyeron dos grandes bloques hegemónicos mundiales de corte ideológicos- políticos, que influenciaba directa o indirectamente sobre los destinos políticos, económicos, sociales culturales e internacionales de los demás países y/o estados que se hallaban sobre la faz de la tierra, los cuales se alinearon de una u otra forma sobre la base de los valores e ideas de estos dos modelos políticos y/o económicos internacionales.
Con el FIN DE LA GUERRA FRÍA, se derrumbó el ODEN BIPOLAR para dar paso a un NUEVO ORDEN INTERNACIONAL, siendo los ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA, la NUEVA POTENCIA HEGEMÓNICA MUNDIAL, ya que desde el colapso mundial de la Unión Soviética, no hay otro estado o combinación de Estados que pueda pensar en retarlo en términos militares, ni siquiera Rusia o China, con quienes se mantienen buenas relaciones políticas comerciales; de esta manera consideramos que los Estados Unidos de Norteamérica, aspira a transformar el mundo a su propia imagen y seme-janza, ejerciendo su poderío mundial, al modo y usanza de una suerte de Sheriff internacional, tanto desde el plano político como económico, protegiendo sus propios intereses de libre comercio y de libre mercado por medio de la acción política, ejerciendo de esta manera una política internacional en la que predominaba el UNILATERALISMO, desde la Administración Clinton, la cual se ha visto aún más RADICALIZADA con la Administración de George Walker Bush., a partir de los atentados terroristas del 11 de septiembre y la intervención militar en Irak, la cual inicialmente no fue autorizada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, por lo que devenía en ilícita, violando las normas del Derecho Internacional así como la Carta de las Naciones Unidas, sin embargo el propio Consejo de Seguridad de la ONU, le daría la legitimidad jurídica retroactiva que necesitaba con la Resolución 1483 (2003), del 22 de mayo del 2003.
Durante la administración Clinton, de acuerdo a lo señalado por George P. Shultz (Ex Secretario de Estado), eran 10 PRINCIPIOS FUNDAMENTALES que regían la Política Exterior de U.S.A,: Credibilidad, Rendición de cuentas, Responsabilidad, Espíritu de construcción, Velocidad, Cooperación internacional, Visión de Globalización, Espíritu de Vigilancia y recurrencia al USO DE LA FUERZA, en caso sea necesario, manteniendose un discurso a favor del multilateralismo, lo cual significó mas un compromiso retórico que real, tal y como lo demuestran su intervencionismo militar humanitario en Haití, Bosnia y Kosovo, y el mantenimiento de la ocupación militar norteamericana en Somalia, siendo que las intervenciones militares en el exterior más frecuentes de lo que habían sido durante casi toda la Guerra Fría, la cual comenzó en las postrimerías del Fin de la Guerra Fría con la invasión a Panamá en 1989 y la Guerra del Golfo Pérsico en 1991, así como la intervención militar a Somalia, durante el gobierno de George Bush padre, gozando de total libertad para poder establecer su poderío en cualquier parte del mundo, minimizando los riesgos mediante el recurso a los ataques aéreos o con misiles, de esta manera se desnivelaba aún mas la profunda sima que desnivelaba el poderío europeo respecto del estadounidense. Con la llegada de la Administración de George Walker Bush, la política exterior de los Estados Unidos, se ha basado en el criterio de la LEGÍTIMA DEFENSA PREVENTIVA, en la que la estrategia de Seguridad Nacional confirma su posición de poder utlizar la FUERZA PREVENTIVA con el fin de eliminar cualquier tipo de amenaza emergente que implique el uso de armas de destrucción masiva (armas biológicas, químicas y nucleares), a partir del 11 de septiembre del 2001 y que justificó dolosamente la actual invasión a Irak, por parte de las fuerzas norteamericanas, y ante el apoyo y la financiación de cualquier estado del mundo que patrocine un eventual ataque terrorista que afecte a su propio territorio, de esta manera lo que se buscaría es prevenir actos hostiles de sus adversarios ejerciendo su derecho inherente a la AUTODEFENSA, ya que de acuerdo a este concepto de Legítima Defensa Preventiva, no se puede esperar con los brazos cruzados a que ocurra algo grave, estando advertidos muy bien advertidos los países que actualmente conforman el denominado actual “Eje del Mal” mencionados por el actual Presidente George W. Bush, en su discurso del 29 de enero del 2002, conformado por Irak, Irán y Corea del Norte, al cual posteriormente han sido agregados Libia, Siria y Cuba. De esta manera podemos concluir que la política exterior norteamericana no es tan proclive en apoyar el adecuado funcionamiento de organismos internacionales como las Naciones Unidas, o de cooperar multilateralmente con otras potencias como Rusia, China o la Unión Europea a fin de lograr objetivos comunes, poseen mas bien una visión hobbesiana y escética del Derecho Internacional y siempre están dispuestos a operar militarmente cuando así lo consideren necesario o simplemente cuando así les sea conveniente a su INTERÉS NACIONAL, basado en una LÓGICA UNILATERAL, estando actualmente enfocados en eliminar las “amenazas externas” como la proliferación de las armas de destrucción masiva, el terrorismo internacional y la lucha contra la repotenciación y proliferación de más “estados proscritos” que conforman el actual “Eje del Mal” , que puedan atentar con el desarrollo integral de su Política Exterior, asícomo de su Seguridad y Defensa Nacional, estableciendo asimismo en el relaciones económicas de libre comercio y libre mercado con las demás potencias del mundo como China, Rusia y el bloque económico de la Unión Europea, asi como con otros países menos desarrollados del mundo a través de los denominados Acuerdos de Promoción Comercial o Tratados de Libre Comercio (TLC).
En el caso de la Unión Europea, su enfoque internacional está mas centrado en el concepto del “multilateralismo”, con el fin de ejercer un contrapeso al sobredimensionado poderío norteamericano, tratando de revitalizar esta línea política internacional a través de los órganos internacionales como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde Francia, Gran Bretaña y podríamos considerar a Rusia para efectos prácticos de este trabajo, tienen DERECHO AL VETO, en la que si alguno de estos países vota en contra de una propuesta, la misma queda rechazada, incluso aunque el resto de miembros haya votado a favor.
Por otro lado el enfoque de la Política Exterior de la Unión Europea, versa en otros puntos muy diferentes a la agenda internacional de la política exterior norteamericana, de este modo los europeos centran su atención en “desafíos” como el constante conflicto étnico, la proliferación del crimen organizado dentro de la Unión Europea, la erradicación y la lucha contra la pobreza, la contaminación del medio ambiente y la lucha contra el calentamiento global, el fortalecimiento de la agenda internacional en materia de Derechos Humanos, y el ahora polémico tema de la inmigración tanto latina como africana; temas de política exterior que a las Administraciones norteamericanas, al parecer no les interesa, por otro lado otro punto importante es el fortalecimiento de la cohesión y de la unidad entre todos los estados miembros que conforman la Unión Europea, a pesar de las discrepancias políticas internacionales que estos puedan mantener como cuando se produjo la invasión a Irak por parte de Estados Unidos de Norteamérica; la que contó con el apoyo de Gran Bretaña, España, Italia, Portugal, Hungría, Polonia, Dinamarca y la República Checa, miembros conformantes de la Unión Europea,lo que se podría interpretar como un apoyo calculado para sopesar la influencia de dos “pesos pesados” al interior del seno de la Unión Europea como son Francia y Alemania, quienes manifestaron profundas reservas al apoyo trasatlántico que dieron los demás países a Estados Unidos con respecto a la guerra en Irak; mientras que, por el lado de la conformación de la misma Unión Europea se mantienen buenas relaciones entre los países que conforman la UE, cumpliendo con el contenido del Tratado de Maastricht, del 7 de febrero de 1992, que dio origen a su actual denominación de Unión Europea, en el que se establece” una política exterior común y de seguridad común para la defensa común” así como la conformación del Parlamento Europeo, además por el lado económico se mantienen excelentes relaciones comerciales con las potencias del mundo como Estados Unidos de Norteamérica, Rusia, China, etc y con otros países y regiones del mundo.
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1 comentario:
oe q palomilla... eso no vale. Escribete algo ps, la coyuntura lo amerita jaaaaaaaaaaaaa
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