ANALISIS DEL MENSAJE PRESIDENCIAL

Autor: Walter Villegas

Si bien es cierto que en dos horas de mensaje presidencial no son suficientes para enfocar cuáles son los verdaderos problemas reales de nuestra realidad nacional, sin embargo haremos un análisis de los puntos más importantes de los planteamientos realizados por el Presidente de la República en su discurso presidencial. Definitivamente lo que más me agradó del mensaje presidencial de este último 28 de julio fue la sensación de haber recuperado una democracia fuerte basada en el PRINCIPIO DE ORDEN Y DE AUTORIDAD; ante la crítica situación de haber vivido durante los últimos seis años en bajo una democracia poco realista, débil y decadente en sus planteamientos programáticos, ni tampoco bajo el manto de corrupción de un régimen hermético y autocrático, que durante la década de loos 90s, afectó y mancilló el Estado de Derecho, el orden y la gobernabilidad democrática bajo un manto de impunidad y de una moral del "vale todo" cargada de un extremo inidividualismo, carente de valores democráticos, sin valores éticos ni morales donde el fin justificaba los medios.
En mi opinión personal, el país necesita de una democracia fuerte y de un liderazgo proactivo, responsable y maduro que señale al Estado y a la Nación cuál debe ser el norte de la sociedad peruana; señalando metas concretas y precisas de cómo debe promoverse el fortalecimiento ético, social, econmómico y democrático de las insitituciones de la República.

Po otra parte, el discurso presidencial me pareció ordenado, florido con el uso de un buen castellano y la verborrea característica del Presidente García aunque sin el histrionismo ni el mesianisimo de su primer gobierno; sin embargo aunque resulte cansador y agotador haber escuchado a lo largo de los exactos 120 minutos en los que expuso en su discurso, los fríos números de cifras y porcentajes, en mi opinión era necesario saber cuáles eran los datos precisos -basados en las estadísticas y en los cálculos de sus asesores- en los que el Presidente García gobernaría con visión de futuro al 2011, año en el que acaba su segundo gobierno y administración como Presidente de la República.

García ordenó su discurso presidencial en 5 líneas básicas de acción que seguirá durante la gestión de su segundo gobierno con visión al 2011:

1.- LA DESCENTRALIZACIÓN:
El Presidente García señaló que la descentralización política y económica del país se dará a través del buen desempeño de los gobiernos regionales y municipalidades de todo el país, siguiendo el modelo de desarrollo de Francia y de los Estados Unidos de América, garantizando el adecuado funcionamiento del Estado Unitario, tal y como lo señala la actual Constitución de
1993.
El mandatario señaló que actualmente los gobiernos regionales y municipales administran 11 800 millones de soles correspondientes al 70% del erario nacional mientras que el Gobierno Central apenas administra el 30% de dicho dinero público, equivalente a 4 800 millones de soles, lo que dió la sensación de que el Presidente ahora "tiraba la pelota" de las obras públicas en la cancha de los gobiernos regionales ante una ola de protestas generalizada en el país durante las últimas semanas, realizadas por el sindicato de maestros, obreros sindicalizados en la Central de Trabajadores del Perú (CGTP), etc; quienes reclamaban al Gobierno Central su aparente desatención y desinterés por los sectores menos favorecidos tanto en la capital como en el interior del país.
Esta medida de descentralización dictada por el Presidente García nos parece oportuna y necesaria ya que creemos que ha llegado el momento de cambiar de mentalidad sobre nuestra realidad política y social que nos permita eliminar progresivamente nuestra antigua visión colonial, en la que se pensaba que todos los problemas del interior del país se resolvían desde Lima, sobre todo en cuanto a la construcción y realización de obras públicas en los pueblos andinos y amazónicos del Perú, debido a que el Estado ha permanecido fuertemente centralizado desde la capital, constituyendo el núcleo del poderío político, económico y social del país, en detrimento y perjuicio de las demás regiones del Perú.

2.- LA AUSTERIDAD:
Este fue el segundo punto a tallar del discurso presidencial en el que García hizo énfasis con el fin de marcar distancia del anterior régimen toledista, cuya administración se basó en el despilfarro, el bochinche y la prodigalidad del Presidente Toledo así como de sus más íntimos colaboradores y asesores y de su propia familia, por lo que el mandatario instó a los gobernantes regionales y a los alcaldes del país a reducir su consumo en combustible y teléfono, entre otros gastos corrientes.
Obviamente estamos de acuerdo con la austeridad que tenga que hacer el Estado y el actual gobierno en general, pero en lo que sí no coincidimos es en lo referente a la reducción de los sueldos a los funcionarios públicos- siendo el tope máximo de sueldos en el Estado, el sueldo presidencial de 18 000 soles de acuerdo y conforme a la Ley de Carrera Pública- puesto que se corre el riesgo de que exista una "fuga de cerebros" al sector privado o a organismos u organizaciones internacionales por lo que bajo una visión realista; el servicio y funcionamiento de la administración pública, podría devenir en más ineficiente y engorrosa de lo que ya es, sin embargo dado que no contaríamos con los mejores profesionales ni técnicos especializados de cada rubro (sean estos abogados, economistas, ingenieros, etc), al interior del sector público, esta situación podría emperorar aún más al interior de los organimos públicos descentralizados (OPDs), ministerios, etc.

3.- EL CRECIMIENTO DEL PERÚ:

El mandatario señaló que el crecimiento del Perú sería progresivo y familiar, es decir que éste no será de la noche a la mañana y que se verá ese resultado en cada uno de los hogares y familias del país, comenzando primero por las ciudades costeñas, hasta terminar en las ciudades de la sierra y de la Amazonía, debido a nuestra accidentada geografía nacional, conformada por la presencia de la Cordillera de loa Andes y de los innumerables ríos y cerros, que hacen que nuestro crecimiento económico y social no sea tan rápido si lo comparamos con otros países como Francia o la cercana Argentina.
El Presidente de la República señaló que las ciudades que crecen más rápido son Talara, Chincha y Trujillo, además de señalar que uno de los ejes de su gestión es la ESTABILIDAD ECONÓMICA del país, EVITANDO LA INFLACIÓN ECONÓMICA, de la que aseguró se mantendrá como máximo al nivel del 2%, lo cual fue el punto más débil y lamentable de la desastrosa gestión administrativa de su primer gobierno, en la que la HIPERINFLACIÓN de ese entonces llegó a superar la increíble cifra de 7 500% al año, siendo el punto más álgido de esta crisis económica en las postrimerías de su primera gestión, trayendo como consecuencia el empobrecimiento de la clase media y sobre todo el daño directo a los sectores más pobres de la población; así que asumimos en nuestro análisis que éste será una de las líneas de acción más importantes que estarán dentro de la cabeza del mandatario, con el fin de cometer dos veces el mismo error y para que pueda reinvindicar tanto a él como a su partido, ante la Historia General del Perú.

4.- REDISTRIBUCIÓN DEL CRECIMIENTO:

Si bien es cierto que el mandatario no mostró una clara estrategia integral de cómo iba a ser el proceso de redistribución del crecimiento y de la riqueza hasta el 2011, año en que acaba su segundo período gubernamental, indicó que como parte de la REDISTRIBUCIÓN SOCIAL se había realizado el pago justo de sus devengados a los pensionistas del D.L N°19990 siendo que los mayores de 80 años, recibirán el íntegro de sus pensiones por parte del Estado, también indicó el pago justo y equitativo a las viudas de los policías y a los deudos de las víctimas en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, así como a los despedidos en los denominados ceses colectivos en la década de los noventas por el gobierno autocrático de Fujimori, así como a los oficiales y personal fueron despdedidos de sus cargos en las Fuerzas Armadas en la década anterior.
Además de enfocarse en la lucha contra la desnutrición infantil, cosa que alabo y felicito, dado la gran cantidad de niños desnutridos y explotados laboralmente en el país; García planteó la necesidad de hacer un PACTO SOCIAL, entre los trabajadores sindicalizados y no sindicalizados con los empresarios de todo el país, con el fin de poder negociar y concertar, respecto a cuánto debe ascender el nuevo salario mínimo o remuneración mínima vital tal y como corresponde a una sociedad democrática y moderna.
Nuestra crítica consiste en que si bien el sueldo o salario mínimo es una variable importante dentro de dicho PACTO SOCIAL, así como el rol fiscalizador del Ministerio de Trabajo, a través de los ismpectores laborales, así como la progresiva eliminación de los denominados services o servicios de intermediación laboral, famosos por sus abusos laborales, al actual mandatario le faltó señalar cuál iba a ser la estrategia para incrementar el índice de productividad laboral así como los mecanismos que contribuyan a fomentar el empleo entre la población; tanto de las zonas urbanas como rurales de la sociedad peruana.

Estoy de acuerdo con que este PACTO SOCIAL, demande la participación responsable de todos los gremios empresariales (de micros, pequeños, medianos y grandes empresarios) que en unión y diálogo con los gremios sindicales así como con los trabajadores no sindicalizados e incluso con los desempleados de este país, a través de los mecanismos del diálogo y del desarrollo, nos puedan insertar en la senda de la reactivación y el desarrollo, lo cual no es trabajo fácil pero he ahí el reto para estar preparados ante los nuevos cambios laborales, económicos y sociales que demanden una nueva posición de liderazgo del Perú en el mundo, a través del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los Estados Unidos de América y la promoción de acuerdos comerciales con la Unión Europea, China, Rusia, Canadá y Japón, entre otros países del mundo globalizado.

5.- FORTALECIMIENTO DEL PERÚ EN EL MUNDO:

El mandatario señaló que al país tenemos que devolverle la autoestima perdida rodeandónos de los países más fuertes y poderosos del mundo, con lo que estamos de acuerdo, con el fin de celebraer nuevos acuerdos comerciales y económicos, a través del libre comercio así como para la generaciónm y fomento de nuevas inversiones privadas en el país.
Además hizo referencia al importante tema de la delimitación marítima con Chile, en la frontera sur del Perú, hya que no se han encontrado los mecanismos des solución limítrofes con el Tratado de 1929, por la vía diplomática; por lo que el gobierno ha decidido optar por ir ante la jurisdicción de la Corte Internacional de Juisticia (CIJ), ubicada en la ciudad de la Haya, en los Países Bajos, para que dé su máximo veredicto jurídico, sin embargo las relaciones comerciales, económicos y políticos con el vecino país del sur, deberán continuar de la mejor manera posible.
En lo que sí no se hizo énfasis fue en lo referente a cuál debe ser el rol del Perú como integrante de la Comunidad Andina de Naciones, con el fin de promover la integración latinoamericana, a través de los denominados acuerdos de integración que estén a la vanguardia de las estructuras jurídicas, políticas, económicas y comerciales que subyacen al mundo globalizado de hoy; que en esta actual coyuntura continental, planteen un liderazgo firme, seguro y democrático; frente al avanze y a la amenaza del chavismo y su autodenominado "socialismo del siglo XXI", en la región sudamericana.

En conclusión, el Presidente García ha demostrado una vez más ser un excelente orador a través de un buen discurso siendo la antítesis del García mesiánico del siglo XX (es decir del año 85); el cual se comprometía a inicios de su gobierno en "construir una sociedad autónoma y libre de la que se eliminen la injusticia, la explotación y la miseria" frente a un García del 2007 que en el siglo XXI, luce ser más prudente, ordenado y menos demagógico que el García de hace 20 años; sin embargo los buenos discursos y el verbo florido quedan en el aire si es que no existen acciones reales que los encaminen hacia hechos concretos por el bien del país y de toda la sociedad peruana en su conjunto.