El Revés no Definitivo de Fujimori

Esta es una noticia que nos llega directamente del cable, de la Agencia de Información Francesa, Air France Presse (AFP), sobre el caso del ex-Presdiente de la República, Ing. Alberto Fujimori Fujimori.

AFP.- La fiscal de la Corte Suprema de Chile, Mónica Maldonado, recomendó este jueves extraditar a Perú al ex presidente Alberto Fujimori por 10 cargos de corrupción y dos de violaciones a los derechos humanos, informó el tribunal.
Se trata de la instancia previa a la sentencia que próximamente debe anunciar el juez Orlando Alvarez.
Los cargos de corrupción acreditan en específico el delito de "peculado" y rechazan el de "asociación ilícita", mientras que los cargos por violaciones a los derechos humanos lo inculpan por los crímenes de los casos La Cantuta y Barrios Altos, según consta en el informe.
El informe de la fiscal no es vinculante, pero es un paso previo para la sentencia en primera instancia que debe emitir próximamente el juez a cargo del proceso Orlando Alvarez, quien este jueves se encontraba con licencia médica.
Fujimori tuvo un ingreso fulgurante a la política peruana en 1990. Era un ingeniero con especialidad en matemáticas y profesor universitario poco conocido que sedujo al país con su mensaje de desprecio hacia los políticos tradicionales, derrotando al archifavorito, el escritor de derecha Mario Vargas Llosa.
Pero 10 años después, en medio de escándalos de corrupción, renunció a la presidencia enviando una carta por fax desde Japón y así selló un destino similar o peor al de los dirigentes que tanto decía aborrecer.
Conocido por su política autoritaria, Fujimori ejerció el poder con mano dura -una característica emblemática de su gestión-, apoyándose en las Fuerzas Armadas, su principal soporte durante su régimen.
De 68 años de edad, su perfil de hombre frío, desconfiado, calculador y poco comunicativo se puso de manifiesto en un estilo de gobierno en que sus principales decisiones eran tomadas en un círculo cerrado de pocos allegados y casi hermético.
Uno de esos personajes era Vladimiro Montesinos, la eminencia gris de su régimen al mando de los servicios secretos y a quien se conocía como el "Rasputín andino", ahora preso y procesado por haber montado una red de corrupción durante la década pasada.
Los adversarios de Fujimori señalan que fue la alianza entre Fujimori y Montesinos -con complicidad de varios de los más encumbrados jefes militares- la que gobernó el país al margen de las formalidades democráticas.Fujimori diría después en su refugio de Tokio que nunca supo de la corrupción de Montesinos, a quien calificó como un "cáncer" que erosionó su gobierno.
A despecho de los cuestionamientos, sus partidarios resaltan lo que consideran logros de su régimen.
Fujimori hizo del pragmatismo su ideario político convirtiéndose en promotor del neoliberalismo económico y haciendo de Perú uno de los mercados más abiertos de América Latina.
Sus partidarios señalan que logró estabilizar la economía tras una época de severa hiperinflación durante el primer gobierno de Alan García, que le precedió.
Además indican que Fujimori fue el artífice de la derrota de los grupos armados, como la organización maoísta Sendero Luminoso y del guevarista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru.
Ese conflicto interno dejó un balance de 70.000 muertos y desaparecidos.
Pero esa victoria contra las agrupaciones armadas trajo consigo acusaciones de graves violaciones a los derechos humanos y la formación del escuadrón de la muerte conocido como Grupo Colina.
Matanzas perpetradas por este grupo clandestino, creado según los grupos de derechos humanos por Montesinos y con anuencia de Fujimori, le valieron probablemente la más grave acusación contra él, la de ser cómplice en la autoría de delitos de lesa humanidad.
Cinco años estuvo en Japón, desde donde intentó mantener su vigencia política e inclusive participar como candidato presidencial en 2006.
En plena campaña electoral en Perú, hizo una jugada arriesgada: el 6 de noviembre de 2005 viajó a Chile, donde fue detenido.
Actualmente, con libertad provisional, espera un fallo sobre su extradición a Lima.
Si bien el fujimorismo se resintió cuando huyó a Japón, el ex presidente aún mantiene una fuerza política importante e influyente en el país (con 13 parlamentarios en el unicameral Congreso de 120 miembros) y su hija, Keiko, es una estrella naciente en la política peruana.

Sin embargo, hemos de dejar bien en claro que el Estado Peruano no puede cantar victoria final sobre este proceso de extradicción, ya que la decisión casi final respecto al caso, la tiene el juez chileno o Ministro Orlando Álvarez, como llaman así a los jueces en el país del sur.
Por último los abogados de la defensa de Fujimori, podrían presentar como último recurso, la apelación de la extradicción ante la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia de Chile, la cual sí tiene la última palabra respecto a este polémico y controvertido caso.